En Automóviles Dumar queremos hablar hoy de cuándo hay que cambiar la correa de distribución. Considerada una de las reparaciones más caras que se pueden dar en un coche por los muchos daños que puede provocar su rotura, vamos a intentar explicar como prevenirla.
Antes de empezar, ¿qué es la correa de distribución y para qué sirve?
Su objetivo es sincronizar el funcionamiento del motor, por lo que cualquier fallo en ella hará que el motor deje de funcionar automáticamente. Tal es su dependencia que si se rompe puede dañar el motor por completo y dejarlo inservible. Se dañarían las válvulas, los pistones y gran parte de los componentes del motor.
Por tanto, es importante saber cuándo cambiarla y hacerlo antes de que se rompa. Todo y que el cambio preventivo de la correa de distribución suele ser una reparación bastante costosa (entre 300€ y 1.000 €), es mucho más barato que el precio tras su rotura y el posterior daño que pueda causar al motor (puede costarte como mínimo 1.500 € y, dependiendo del alcance de los daños, hasta 6.000 €).
¿Cuándo cambiar la correa de distribución?
Cada fabricante de coches fija de forma aproximada el intervalo de km a los que se recomienda cambiar la correa de distribución, no obstante el tipo de uso y el ambiente en el que circula el vehículo son elementos que influirán en el dicho intervalo.
Si se conduce en entornos urbanos, el cambio deberá producirse con anterioridad al indicado por el fabricante. Es decir, si se recomienda hacerlo a los 100.000 km, deberíamos hacerlos a los 80.000 km.
Por contra, si solemos realizar trayectos largos, el cambio de correa si que se ajustará al indicado por el fabricante.
Dependiendo de si el lugar es frío o caliente, el nivel de polvo o la humedad del lugar en el que vivas también habrá que cambiar antes o después la correa. Podrás seguir las estimaciones del fabricante si vives en un entorno de temperatura media y donde el calor y el frío no sean protagonistas durante todo el año.
Si por el contrario vives en lugares muy fríos (a menos de 0 grados) o calurosos (con temperaturas superiores a 30 grados), tendrás que cambiar la correa mucho antes.
Una correa de distribución puede llegar a durar hasta 10 años, pero esos son casos más aislados. Siempre se recomienda que se realicen revisiones cada 4-5 años y, dependiendo del estado de la correa, te decidas si cambiarla o no.